En los últimos meses he leído algunos post
referidos a la comunicación y divulgación científica, donde resalta el poco
entendimiento que
existe del quehacer científico. ¿Qué hacemos los investigadores? ¿qué avances
hemos logrado? ¿de qué forma nuestras investigaciones contribuyen al desarrollo
de un país?. Si no viene un periodista a preguntarnos, o lo expresamos a través
de una página web personal, la cosa se torna complicada; sin embargo hay otros
medios. Un lugar donde mostramos una parte de nuestro trabajo son los congresos
o reuniones científicas, donde además solemos expresarnos de una forma más
entendible. A este tipo de reuniones concurren desde investigadores de alto
nivel hasta estudiantes universitarios, es decir, un público variopinto, razón
por la cual las conversaciones y charlas suelen ser más digeribles. En este
tipo de eventos se suele socializar mucho, pero a la vez creo que los
asistentes compartimos un objetivo oculto: darnos a conocer en el círculo
científico y/o promocionar nuestras investigaciones, y es que nunca sabes con
quién te puedes topar.
Pero, ¿para qué sirve asistir a un congreso?
Depende de donde te encuentres parado y
hacia donde quieres ir. Me explico, si eres estudiante te interesará informarte
de lo que se está haciendo en el campo de tu interés, si eres listo puede que
hagas buenos contactos para realizar una estancia, maestría o incluso doctorado
con alguno de los investigadores visitantes. Si eres profesor universitario,
puede que un congreso sea el sitio ideal para que contactes con investigadores
que compartan las mismas inquietudes que tú, en el mejor de los casos habrás
establecido nexos para futuros proyectos de investigación, propios o donde colaborar. Sea como sea, ir a un congreso solo de oyente es poco o nada
rentable, hay que
tener un objetivo claro: socializar, pero teniendo presente que de ahí se puede
sacar un mayor beneficio propio. He aquí la parte difícil: hay que romper el
hielo, preguntar, darse a conocer, pedir correos electrónicos, quien no se
manifiesta no obtendrá nada.
Además de
todo ello, los congresos también te sirven para el curriculum (no si vas
solo de asistente); seamos claros, una charla (o un póster) en un congreso no
es una publicación científica (aunque aparezca en un libro de resúmenes); sin
embargo, en algunas instituciones puntúan como divulgación científica, es
decir, como si hubieras escrito una nota periodística, y aquí vuelvo a lo
mencionado en el primer párrafo de esta entrada: divulgar nuestros
conocimientos también es parte de nuestra tarea como investigadores. ¿Quieres saber que hacen los científicos? Anímate y participa de un congreso científico.